miércoles, 15 de febrero de 2012

El caso de Julian Assange




Julian Assange. Así se llama el protagonista del video. Este ciudadano australiano es un programador (léase hacker también), periodista y activista de Internet. Dicho así no destacaría por nada, salvo porque él es el responsable de lo que a continuación vamos a exponer. El señor Assange fundó allá por 2006 un sitio web llamado Wikileaks. No nos dejemos engañar por su parecido con Wikipedia. La palabra “leak” en inglés significa “goteo” o “filtración”. Y es precisamente a lo que se dedica este señor y el resto de su organización, a la publicación de informes anónimos y documentos filtrados que ponen de manifiesto actividades poco sensibles, por llamarlas de algún modo, y de interés público. Todo lo que rodea a Wikileaks es un halo de misterio y de desinformación, ya que además de no revelar sus fuentes tampoco se exponen los modos por los cuales la información ha sido obtenida, si bien por cauces ordinarios como la investigación o empleando otros métodos menos ortodoxos, como sobornos a cambio de información comprometida, etc. Leído hasta aquí podríamos pensar que la actividad del señor Assange no tiene mucha trascendencia, pero esta idea se viene abajo cuando comprobamos que el principal foco de su actividad “investigadora” se centra en la actividad exterior de Estados Unidos. Son datos escalofriantes el comprobar cómo Wikileaks, a lo largo de 2010 publicó, por ejemplo, un video en el que soldados estadounidenses asesinaban desde un helicóptero a un periodista de la agencia Reuters, a su ayudante y a nueve personas que les rodeaban, argumentando que suponían una amenaza para el vehículo aéreo. También fueron publicados 92.000 documentos referentes al conflicto de Afganistán, donde se incluían víctimas civiles afganas, etc. Pero el caballo de batalla de Assange fueron los casi 400.00 documentos publicados sobre la guerra de Irak, donde se exponía el uso sistemático de métodos de tortura contra iraquíes por parte de fuerzas americanas, cifras de bajas civiles, la ayuda de la vecina Irán a fuerzas insurgentes… Un dato que no se puede obviar es que el señor Assange, a día de hoy, está acusado de delito sexual por acoso a una menor. Dicha acusación no trascendería si el propio acusado no corriera el peligro que corre al tener la posibilidad de verse extraditado a EE.UU y ser juzgado no por este delito de acoso, si no por el de traición, delito que en EE.UU es condenado con la pena de muerte… Además de este problema, el fundador de Wikileaks se enfrenta a otro problema serio, que es la financiación de su organización. Uno de los principales problemas de cargar contra empresas como Visa, MasterCard y PayPal es que a través de ellas le llegaban las donaciones de lectores a Assange para costear su empresa. Dichas empresas del sector financiero decidieron bloquear toda transacción cuyo beneficiario fuera Wikileaks, por lo que las donaciones se han visto claramente reducidas.
Otras empresas como RIM (Blackberry), Google o Facebook fueron puestas en evidencia al publicar Wikileaks que los usuarios de dichos servicios podrían ser víctimas al ser expuestos públicamente sus perfiles y su información personal.
En el video podemos observar claramente como Assange y su fundación exponen cifras, reales o no, es lo de menos, de lo que costaría intervenir 20 teléfonos, el coste de sus abogados por los numerosos procesos judiciales en los que se ve involucrado, el coste que le ha causado su arresto domiciliario, las donaciones como anteriormente hemos mencionado bloqueadas por las compañías anteriores…y, curiosamente, valiéndose de un tipo de anuncio propio de MasterCard, parodiarla diciendo que lo que no tiene precio es ver cambiar el mundo gracias a tu trabajo.
El resumen breve de la historia de Assange y su organización plantea infinitas preguntas. ¿Es legal combatir conductas ilegales de países con la ilegalidad de obtener información mediante traición y filtrarla al público? ¿Es correcto, no ya ético, que no lo es, el hecho de que haya gente que, trabajando para su país, venda o regale secretos sobre conductas, que bien pueden ser legales o ilegales, a pesar de traicionar a tu país? ¿Qué es más ilegal? ¿Todo fin justifica todos los medios empleados para llegar a él? ¿Puede la información, puesta en las manos equivocadas, ser más peligrosa incluso que la desinformación? ¿Necesitamos realmente saber “todo” de “todos”?  En este blog no podemos dar la respuesta a estas preguntas, puesto que probablemente haya tantas respuestas como arena en el mar. No pretendo convencer a nadie de nada, en todo caso la intención es hacer dudar de lo que cada uno piensa.

6 comentarios:

  1. ¡Enhorabuena por el post, me ha encantado!

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  2. Dudar me has hecho dudar y mucho.

    Increíble el post!



    QueenA

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  3. Muy buen post BJE! Sin embargo no estoy del todo de acuerdo en como se pinta a este hobre como el malo de la película. Vale que él haya hecho cosas ilegales o poco éticas para conseguir sacar a la luz esa información, pero es que el verdadero problema importante es la propia información!! Todos los secretos de la guerra de Irak, crímenes, sobornos, engaños, etc. de grandes empresas e incluso de grandes gobiernos! Son ellos los verdaderamente culpables y los que deberían ser juzgados y no este hombre (que aunque no sea la Madre Teresa y lo haya hecho para lucrarse). Tengo claro que por muchos abogados que pague, este hombre no verá más la luz del día. Es lo que tiene meterse contra los grandes!

    Morrison

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    Respuestas
    1. Comparto totalmente lo que me explicas. Tienes toda la razón, no se juega con los niños grandes!
      Muchas gracias por seguirnos y comentar!

      BJE

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